ABURREN A SENDEL ESCENAS CON LUCERO

Aburren a Sendel escenas con Lucero Sábado
Las escenas candentes que ha realizado al lado de "la hiena" han despertado, además del interés del audiencia, el morbo, porque es una imagen no conocida de Lucero, aunque para Sergio Sendel han sido 'de güe..., tediosas y aburridas'
MONTERREY.- El actor, quien da vida a Damián Gallardo en la telenovela Mañana Es para Siempre, franco como es su carácter, dijo que su responsabilidad y la de Lucero es hacer creíble su trabajo, pero no quiere decir que le guste.

"Es parte de nuestra responsabilidad; no podemos intentar hacer mal las cosas, al contrario, hay que hacerlas lo más creíble, en la medida que sea posible", comentó Sendel, "esas escenas me dan güe..., fastidio, son las que menos me gustan, son tediosas, aburridas, las que menos me han gustado en mi carrera".

Con 20 años de trayectoria, el actor aclaró que grabar momentos candentes, donde se supone hace el amor con Bárbara, a quien da vida Lucero, no es nada sencillo ni cómodo.

Y es que adoptar el papel de galán, aseguró, no es lo que ha desempeñado en su carrera; regularmente sus personajes son villanos y no le toca hacer escenas de sexo.

"Primero porque no soy el galán que México esperaba", dijo, "de entrada no estoy acostumbrado a hacerlo en mi carrera, siempre he estado muy cargado al antagónico y éste tiene otro perfil".

Pero parece que no es el único que se siente incómodo con las escenas subidas de tono; aseguró que también Lucero.

"Cuando me tocan este tipo de escenas para mí es incómodo y sé que para la actriz también, en este caso para Lucero no es la excepción, finalmente se ven bien y eso es lo que vale".


A disgusto

No está en desacuerdo con su trabajo en Mañana Es para Siempre, al contrario, está contento que es una telenovela bien aceptada por el público, e incluso por los ejecutivos de Televisa, aunque Sergio Sendel reconoció que también le da "flojera" su papel de mandilón de Damián Gallardo.

"Ha sido una novela agradable, pero mi personaje en ese sentido me da un poco de güe..., si lo relaciono con el otro (Aarón), que era más erótico, mucho más agresivo y vital".

(Paula Ruiz/

Agencia Reforma